Oí al Mensajero de Dios -la paz y las bendiciones de Dios sean con él-, diciendo:

«Quien de vosotros vea una mala acción, que la cambie con su mano, si no pudiera con su lengua, y si no pudiera, entonces en su corazón, y esto es lo más débil de la fe».

Lo transmitió Muslim.

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sábado, 6 de marzo de 2010

Internet: anula, incapacita y asesina a héroes potenciales.

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Los grandes personajes de la historia en la humanidad nacieron antes de que Internet tuviera el auge de nuestros días.

¿Será mera coincidencia o es ésta la razón por la que en nuestro tiempo los héroes están casi extintos de nuestra sociedad?

Esto podría ser una señal de alarma para personas que como yo, fuimos chapadas a la “antigua”, de modelo anticuado y completamente obsoleto.
¿Qué habrían hecho Einstein, Darwin, Aristóteles, Gandhi o inclusive el Che Guevara con la distracción enviciante de Internet en sus manos?

¿Contaríamos hoy en día con sus geniales e indispensables e invaluables aportes invaluables al ser humano en nuestra vida?

No podría asegurarlo, actualmente los grandes genios y cerebros que genera nuestra raza han sido secuestrados por la red.

¿Quién con una conexión de banda ancha en su hogar, celular o computadora portátil quiere emular a Charles Darwin y observar a la naturaleza en la forma tan detallada con que lo hizo? Ahora en vez de ello puede acceder a todas las imágenes que cualquier buscador le ofrece hoy en día, y talvez (sólo talvez) en su lugar el maravilloso intelecto que donó a la humanidad, se abocaría hoy en día a tratar de “mejorar” la calidad de mega píxeles esas fotografías.

¿Quién, tal como Albert Einstein, habría insistido en asistir a las escuelas normales en las cuales algunas veces fue tratado y declarado como retrasado mental para demostrar al mundo entero de la madera con que estaba hecho y deslumbrar con su genio a la raza humana si hubiera podido tener una educación autodidacta por Internet?

¿Habría abandonado (con la Internet actual) su tierra natal el Che Guevara para recorrer y conocer por sí mismo Latinoamérica en “la poderosa” y defender sus nobles ideales a costa de su vida? Es muy posible que si estuviera entre nosotros, pasaría completamente desapercibido, sin pena ni gloria. Se dedicaría con su temperamento corrosivo a maldecir y luchar contra viento y marea aún a costa de su vida cuando su conexión se desconecte y no pueda encontrarse con sus camaradas cibernautas en vez de ir a prepararlos personalmente.

¡Mozart creando sinfonías a temprana edad es solo una quimera, esos niños prodigio son nuestros hackers actuales!

Ahora si vemos a un hombre tan delgado como Gandhi, no sería porque esté realizando alguna huelga de hambre para reinvindicar los derechos de su nación: su extrema delgadez serían por causa de las horas en que se abstiene voluntariamente de comer y beber para no perderse las últimas noticias o actualizar su facebook.

Los grandes talentos actuales han cambiado, se han modernizado de tal forma que incluso han llegado a traspasar sus gustos en cuanto al modelo femenino ideal al que habían sometido y transformado a la mujer a lo largo de la era moderna, por lo tanto con su modelo en mente se dedicaron a llevarlo a la computación: ahora sus ordenadores deben ser capaces de almacenar en su memoria interna la mayor cantidad de datos y funciones posibles siendo cada vez “máquinas” más pequeñas, ultradelgadas, compatibles, amigables y con todos los puertos de entrada y salida tradicionales y modernos disponibles en cualquier momento y lugar.

A estas nuevos “modelos” sí se les perdona, no se les critica y hasta consciente que aumenten de peso, pero solamente en kilo bytes, jamás en su “carcaza”.

No cabe duda imaginar de que nuestros sabios cibernautas jamás se tomarán la molestia en crear un modelo que se enfade o resienta por falta de atención, mantenimiento o cariño.

Los genios que antaño se quejaban de los individuos que están absortos y embrutecidos con el fútbol, ahora han sido abducidos ellos mismos por la banda ancha, hacen creer a sus contactos que como su distracción es inteligente y son selectivos, pertenecen al selecto club de los intelectuales cibernéticos.

De nada vale que sus familiares y amigos en la vida real se quejen con ellos por la falta de atención y distracción con que son tratados, utilizarán la lamentable excusa de que los grandes genios siempre han sido así: distraídos, descuidados en su apariencia y relaciones afectivas y por lo tanto es perdonable y hasta comprensible su desconexión con el mundo y sus seres queridos en la vida real.

Los héroes actuales, tal como al Zaidi, Aminetu Haidar, Michael Moore, Patch Adams, Malalai Joya o el Sub-Comandante Marcos, se encontraban offline cuando realizaron los actos de los que nos enorgullecemos.
Ojalá sigan así.

Rashida Jenny Torres
Musulmana costarricense

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