Oí al Mensajero de Dios -la paz y las bendiciones de Dios sean con él-, diciendo:

«Quien de vosotros vea una mala acción, que la cambie con su mano, si no pudiera con su lengua, y si no pudiera, entonces en su corazón, y esto es lo más débil de la fe».

Lo transmitió Muslim.

Teléfono: 005068493-6876

99 nombres de Allah

Islam y Musulmanes de Costa Rica

¿Qué piensas del Islam?


lunes, 29 de marzo de 2010

Declaracion publica de la Casa Memorial Salvador Allende y la comunidad Chilena residente en la Habana, Cuba.

Photobucket
La Habana, 24 de marzo de 2010

“Año 52 de la Revolución”


En el transcurso de los últimos días, dirigentes políticos e instituciones del Estado de Chile, con el beneplácito del propio Presidente de la República y para el deleite de la prensa de derecha, han emprendido una escalada de declaraciones injuriosas contra Cuba, sumándose así a la nueva ofensiva internacional de carácter abiertamente injerencista en los asuntos internos de este país hermano que solidariamente nos da acogida, nuevamente bajo el pretexto de las supuestas violaciones a los Derechos Humanos y de la supuesta falta de democracia en la Isla.

Ante ello, la Casa Memorial Salvador Allende, recogiendo el sentir de la inmensa mayoría de los chilenos residentes en Cuba, quiere declarar lo siguiente:

1.- Que ninguna institución del Estado de Chile tiene autoridad moral para dar lecciones de Derechos Humanos, ni a Cuba ni a ningún otro país del mundo. Tanto el actual gobierno como las dos cámaras que conforman el poder legislativo en Chile, se sostienen en buena medida en partidos que, o promovieron abiertamente el terrorismo de Estado bajo la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1989), o sencillamente guardaron cómplice silencio ante toda su secuela de exiliados, encarcelados, desaparecidos, ejecutados y torturados; violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos sobre las que, en última instancia, muchos de sus personajes multiplicaron sus fortunas y respecto de la mayoría de las cuales aún no se ha hecho justicia, tal y como lo demuestran varios informes elaborados por instituciones chilenas e internacionales.

La clase política chilena no tiene moral para exigir y dar lecciones en esta materia, toda vez que en Chile se violan los más esenciales Derechos Humanos. El terremoto que azotó a varias regiones chilenas el pasado 27 de febrero, una vez más ha dejado al desnudo la existencia de los “dos Chiles”: uno opulento, que concentra cada vez más la riqueza y el poder político en pocas manos, y otro que de la noche a la mañana ve caer sus viviendas, sus escuelas, sus hospitales, y con ellos, buena parte de sus sueños de una vida mejor y digna. De esos Derechos Humanos, que para el pueblo de Cuba y sus autoridades, por el contrario, han sido preocupación principal por más de 50 años, sencillamente en Chile no se habla, o se los menciona como algo que sólo hay que corregir, como si no se tratara de un problema estructural de un modelo de acumulación que en el mundo actual viene demostrando su fracaso por todas partes.

Pero incluso con respecto a los Derechos Humanos que tanto preocupan a la clase política y a la prensa pseudo-democrática chilena, tampoco tienen nada qué decir. En Chile se persigue, se encarcela y se tortura a los pueblos mapuche que defienden lo poco y nada que les ha quedado tras la usurpación de sus tierras y su cultura por parte del Estado de Chile a lo largo de varios siglos; se alimenta por la fuerza a la comunera mapuche Patricia Troncoso en huelga de hambre, violando impunemente la Convención de Malta; se criminaliza la protesta social; se debe solicitar autorización al gobierno para marchar en las calles, se reprime con la fuerza física y mediática a los miles de estudiantes que demandan mejorar la calidad y la cobertura de la educación en todos sus niveles, con la policía antimotines a los trabajadores que en la calles de Chile cada cierto tiempo demandan una repartición sólo un poco más justa de los logros macroeconómicos del “ejemplo chileno”; en Chile, como lo han consignado organismos internacionales, se tortura a los prisioneros por delitos comunes que viven hacinados en las cárceles, verdaderas escuelas de delincuencia, mientras que, por el contrario, en Cuba se les brinda la oportunidad de estudiar o desarrollar habilidades para su reinserción social. En los muchos años que tantos de nosotros hemos compartido con el pueblo de Cuba, nunca hemos visto protestas multitudinarias reprimidas por la fuerza, el pueblo marcha en las calles de la Habana y el país por su propia voluntad a verdaderas jornadas de fiesta popular en celebración y defensa de sus conquistas sociales.

2.- Que nos resultan no sólo injustas y unilaterales, sino sencillamente carentes de la ética más elemental las declaraciones oficiales del Senado, a propuesta de tres senadores demócrata-cristianos, y de la bancada del Partido Socialista en la Cámara de Diputados de Chile sobre Derechos Humanos y democracia en Cuba. En el primer caso, y tal como lo han destacado algunos de sus propios compañeros de partido, se trata a todas luces de una maniobra oportunista destinada a congraciarse con el actual Presidente de Chile y cerrar filas con la agenda internacional de la nueva Cancillería. En todo caso, no es primera vez en la historia que el partido demócrata cristiano chileno recurre a la artimaña de arrimarse al bando de los ganadores de turno para recuperar protagonismo en la escena política, y en cierto modo es hasta comprensible en el contexto de una clara tendencia a la baja en la preferencia de los electores que viene experimentando dicho partido en los últimos años.

Más nos sorprende la declaración de la bancada socialista de la Cámara de Diputados, pues se trata de un partido cuya mayoría de militantes de base y muchos de sus dirigentes, más allá de las lógicas discrepancias, tradicionalmente han mantenido una relación de amistad y respeto con Cuba, relación por la que, entre otras cosas, muchos de sus miembros y sus familias fueron acogidos con los brazos abiertos por el pueblo cubano. Ciertamente, esto no los obliga a compartir el camino que soberanamente se ha dado Cuba, toda vez que éste país ha tendido su mano solidaria de manera desinteresada en cada rincón del mundo cada vez que ha sido necesario, pero sí les impone un compromiso ético básico con la verdad y con la consideración de la totalidad de los hechos antes de emitir juicios a la ligera. Más aún, sorprende e indigna que dicha bancada no haya hecho una sola mención al criminal bloqueo que los EEUU ha impuesto por más de 50 años sobre el pueblo de Cuba, algo que al menos el senado chileno tuvo el decoro de mencionar en la declaración ya aludida, cosa que por lo demás casi nadie seriamente se atreve a defender abiertamente hoy en día. Indigna que además se haya hecho en el mismo momento que una brigada médica cubana presta ayuda solidaria a las víctimas del reciente sismo, dos hospitales de campaña enviados por el gobierno de Cuba desplegado en la sexta región de Chile.

3.- Que todas estas maniobras se insertan en el marco de una nueva campaña de ataques fundados en el odio y la mentira, orquestada por los EEUU y sus más incondicionales aliados, en respuesta a los logros más recientes de la diplomacia cubana en la región de Nuestra América y el mundo, tales como la participación de Cuba en la Cumbre de Río, la reciente resolución para su reincorporación a la OEA, su participación en la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, etc., así como en respuesta al reconocimiento de las conquistas sociales del pueblo y el gobierno de Cuba por parte de organismos internacionales como la OMS/OPS, la Unicef, etc.

Como chilenos residentes, que hemos vivido, compartido y luchado junto a su pueblo tenemos una enorme deuda de gratitud con Cuba. Pero, más que eso, tenemos un compromiso con los principios fundamentales que han guiado sus destinos por más de 50 años. Es lo que nos hace rechazar y condenar enérgicamente esta nueva andanada de odiosidades y mentiras que sólo mentes muy estrechas y mal intencionadas pueden sostener con tanto ahínco, aquellas que no pueden aceptar que Cuba siga optando y ganando batallas en aras de un modo distinto de construir una sociedad mejor, más justa e igualitaria, centrada en las necesidades fundamentales de hombres y mujeres y por el mejoramiento de la especie humana.

http://www.kaosenlared.net/noticia/declaracion-publica-casa-memorial-salvador-allende-comunidad-chilena-r

Monseñor Óscar Romero.

Photobucket

Enrique Javier Díez Gutiérrez
La ventana


Hoy 24 de marzo se cumple el 30 aniversario del asesinato del Obispo Óscar Arnulfo Romero, conocido como Monseñor Romero, sacerdote católico salvadoreño que fue célebre por su predicación en defensa de los derechos humanos y murió asesinado en el ejercicio de su ministerio pastoral.

Fue nombrado secretario de la Conferencia Episcopal de El Salvador en 1968. El 3 de febrero de 1977, es nombrado por el Papa Pablo VI, como Arzobispo de San Salvador. Algunos consideraron a Romero como el candidato de los sectores conservadores que deseaban contener a los sectores de la Iglesia archidiocesana que defendían la «opción preferencial por los pobres».

A partir de 1978 comenzó a cambiar su predicación y pasó a defender los derechos de los desprotegidos. Aquel religioso de sesenta años se metió pueblo adentro de pronto, asediado por la pobreza de sus conciudadanos, por la represión, por los crímenes que los escuadrones de la muerte realizaban contra esa Iglesia que había optado por la solidaridad y el compromiso.

Como arzobispo, Monseñor Romero comenzó a denunciar en sus homilías los atropellos contra los derechos de los campesinos, de los obreros, de sus sacerdotes, y de todas las personas que recurrieran a él, así como las numerosas violaciones de los derechos humanos en el contexto de violencia y represión militar que vivía el país, manifestando públicamente su solidaridad hacia las víctimas de esta violencia política en San Salvador. En estas homilías, transmitidas por la Radio diocesana, denuncia especialmente los asesinatos cometidos por escuadrones de la muerte y la desaparición forzada de personas, cometida por los cuerpos de seguridad y pide una mayor justicia en la sociedad.

En agosto de 1978, publica una carta pastoral donde afirma el derecho del pueblo a la organización y al reclamo pacífico de sus derechos.

En octubre de 1979 recibe con cierta esperanza las promesas del nuevo gobierno de la Junta Revolucionaria de Gobierno, pero con el transcurso de las semanas, vuelve a denunciar nuevos hechos de represión realizados por los cuerpos de seguridad. Dos semanas antes de su asesinato había declarado: «He estado amenazado de muerte frecuentemente. He de decirles que como cristiano no creo en la muerte sin resurrección: si me matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño. Lo digo sin ninguna jactancia, con gran humildad».

Incluso un día antes de su muerte hizo un enérgico llamamiento al ejército salvadoreño:
Yo quisiera hacer un llamamiento, de manera especial, a los hombres del ejército. Y en concreto, a las bases de la Guardia Nacional, de la policía, de los cuarteles... Hermanos, son de nuestro mismo pueblo. Matan a sus mismos hermanos campesinos. Y ante una orden de matar que dé un hombre, debe prevalecer la ley de Dios que dice: «No matar». Ningún soldado está obligado a obedecer una orden contra la Ley de Dios. Una ley inmoral, nadie tiene que cumplirla. Ya es tiempo de que recuperen su conciencia, y que obedezcan antes a su conciencia que a la orden del pecado. La Iglesia, defensora de los derechos de Dios, de la Ley de Dios, de la dignidad humana, de la persona, no puede quedarse callada ante tanta abominación. Queremos que el gobierno tome en serio que de nada sirven las reformas si van teñidas con tanta sangre. En nombre de Dios y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: Cese la represión.
Sus homilías, que en aquellos años se intentaron acallar por tantos métodos, eran denuncia y profecía, como si aquel arzobispo hubiera descubierto las causas precisas de la pobreza y las culpabilidades concretas de la represión de los pobres: «Estas desigualdades injustas, estas masas de miseria que claman al cielo, son un antisigno de nuestro cristianismo» (homilía 18 de septiembre de 1977).

«Una religión de misa dominical pero de semanas injustas no le gusta al Señor. Una religión de mucho rezo pero con hipocresías en el corazón, no es cristiana. Una Iglesia que se instalara sólo para estar bien, para tener mucho dinero, mucha comodidad, pero que olvidara el reclamo de las injusticias, no sería la verdadera Iglesia» (4/12/1977).

«Aun cuando se nos llame locos, aun cuando se nos llame subversivos, comunistas y todos los calificativos que se nos dicen, sabemos que no hacemos más que predicar el testimonio subversivo de las bienaventuranzas, que le han dado vuelta a todo para proclamar bienaventurados a los pobres, bienaventurados a los sedientos de justicia» (11/05/1978).

«Muchos quisieran que el pobre siempre dijera que es “voluntad de Dios” vivir pobre. No es voluntad de Dios que unos tengan todo y otros no tengan nada» (10/09/1978).

«Cuando se le da pan al que tiene hambre lo llaman a uno santo, pero si se pregunta por las causas de por qué el pueblo tiene hambre, lo llaman comunista, ateísta. Pero hay un “ateísmo” más cercano y más peligroso para nuestra Iglesia: el ateísmo del capitalismo cuando los bienes materiales se erigen en ídolos y sustituyen a Dios» (15/09/1978).

«Una Iglesia que no sufre persecución, sino que está disfrutando los privilegios y el apoyo de la burguesía, no es la verdadera Iglesia de Jesucristo» (11/03/1979).

«¿De qué sirven hermosas carreteras y aeropuertos, hermosos edificios de grandes pisos, si no están más que amasados con sangre de pobres que no los van a disfrutar?» (15/07/1979).

«Espero que este llamado de la Iglesia a la justicia social no endurezca aún más el corazón de los oligarcas sino que los mueva a la conversión» (24/02/1980).

Por luchar a favor de la justicia social, por reclamar en voz alta la defensa de los derechos de los sectores empobrecidos y explotados, fue asesinado. Este fue su delito, el compromiso con los pobres y la denuncia de la opresión. Al igual que Jesús de Nazaret. El lunes 24 de marzo de 1980 fue asesinado, cuando oficiaba una misa. Su asesinato provocó la protesta internacional.

En 1993 la Comisión de la Verdad para investigar los crímenes más graves cometidos en la guerra civil salvadoreña, concluyó que el asesinato de Monseñor Oscar Romero había sido ejecutado por un escuadrón de la muerte formado por civiles y militares de derecha y dirigidos por los militares capitán Álvaro Saravia y mayor Roberto D'Aubuisson (fundador del Partido ARENA que gobernó El Salvador de 1989 a 2009).

Como escribió el poeta y Obispo Casaldáliga: «¡San Romero de América, pastor y mártir nuestro! Pobre pastor glorioso, asesinado a sueldo, a dólar, a divisa. Como Jesús, por orden del Imperio. Los pobres te enseñaron a leer el Evangelio. San Romero de América, pastor y mártir nuestro: ¡nadie hará callar tu última homilía!».


Fuente:http://laventana.casa.cult.cu/modules.php?name=News&file=article&sid=5413

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=103130&titular=monseñor-óscar-romero-

Un rabino planea un “milagro” en el Muro Occidental en Jerusalén.

Photobucket

Jonathan Cook
Counterpunch


Traducción del inglés para Rebelión por Germán Leyens



El gobierno israelí ha indicado que seguirá adelante con un plan para ampliar la planicie de oración judía en el Muro Occidental en la Ciudad Vieja de Jerusalén, a pesar de advertencias de que ese acto podría provocar una tercera Intifada.
Responsables israelíes rechazaron esta semana una proposición de un tribunal de Jerusalén de diferir el plan después que el juez aceptó que la expansión de la planicie violaría el acuerdo de “statu quo” que cubre los sitios sagrados de la Ciudad Vieja. Las autoridades islámicas aceptaron el acuerdo después de que Israel ocupó Jerusalén Este en 1967.

El sitio considerado por los funcionarios israelíes está ubicado en la Puerta Mughrabi, una entrada a la explanada de las mezquitas conocida como Haram al Sharif, el sitio más delicado en el conflicto entre Israel y los palestinos. En su interior están la mezquita Al Aqsa y la Cúpula de la Roca con su domo dorado.

Violaciones anteriores por Israel de la autoridad islámica en el sitio han provocado choques entre la policía israelí y los palestinos. Una visita fuertemente armada de Ariel Sharon en el año 2000 a la explanada de las mezquitas, poco antes de que llegara a ser primer ministro, para declarar derechos israelíes en el lugar, provocó la segunda Intifada.

En las últimas semanas, los analistas se han preocupado cada vez más de que una tercera Intifada sea inminente ya que el gobierno de Benjamin Netanyahu ha aumentado la construcción de asentamientos en Jerusalén Este y declarado varios lugares que están en Cisjordania como sitios del patrimonio judío.

Otro asalto contra el control musulmán tan cerca a la mezquita Aqsa corre el peligro de “echar leña al fuego,” dijo Hanna Sweid, miembro árabe del parlamento israelí que presentó las objeciones de planificación originales al proyecto israelí.

Según evidencia presentada al tribunal de Jerusalén, funcionarios israelíes utilizaron daños menores a una rampa de piedra que conducía a la Puerta Mughrabi como pretexto para demolerla hace seis años. La intención es reemplazar la rampa por un puente metálico permanente y luego ampliar la planicie de oración judía al área donde estaba la rampa.

El proyecto es la genial idea de Shmuel Rabinowitz, el rabino a cargo del Muro Occidental, quien declaró que el daño a la rampa en 2004 era un “milagro” que había ofrecido a Israel la posibilidad de tomar el control de más terreno de las autoridades islámicas en la Ciudad Vieja.

El plan del rabino fue aprobado a finales de 2007 por un comité ministerial especial dirigido por Ehud Olmert, entonces primer ministro. El proyecto también recibió el respaldo de Netanyahu, aunque congeló el trabajo de construcción en julio por orden del tribunal de Jerusalén.

La jueza Moussia Arad propuso en enero que se reinstalara la rampa, o por lo menos que el puente siguiera la ruta exacta de la rampa, y que se prohibiera toda oración en el lugar. Esa posición recibió el respaldo de funcionarios de las Naciones Unidos que controlan el trabajo de Israel en la Puerta Mughrabi.

Las autoridades islámicas jordana, turca y palestina han expresado todas su profunda preocupación por las excavaciones israelíes en la Puerta Mughrabi, que se ven como un preludio a la expansión de la planicie.

Los observadores esperaban que, ante el peligro de otro altercado con EE.UU. tan pronto después de la crisis diplomática provocada por la construcción de asentamientos israelíes en Jerusalén Este, Netanyahu pudiera aceptar el compromiso del tribunal.

Se ha demostrado que se equivocaban.

“Netanyahu tiene un historial de pisoteo de los derechos palestinos en la Ciudad Vieja,” dijo el Sweid. “Hay motivos para preocuparse por lo que se propone esta vez.”

En 1996, durante su período anterior como primer ministro, Netanyahu abrió el túnel del Muro Occidental, otra excavación cercana a la explanada de las mezquitas, lo que llevó a choques en los que murieron 75 palestinos y 15 soldados israelíes.

Israel, que dice que las mezquitas se encuentran sobre las ruinas de dos antiguos templos judíos construidos por Salomón y Herodes, se refiere al sitio como Monte del Templo y ha aventurado una reivindicación a un grado de soberanía sobre el área en recientes negociaciones de paz.

La semana pasada, en una señal de las consecuencias explosivas de travesear con el statu quo relacionado con los sitios sagrados de Jerusalén, estallaron disturbios en un “día de la cólera” en Jerusalén Este después del anuncio de Israel de que había reconstruido una vieja sinagoga, la Hurva, cercana a las mezquitas.

“Haram al Sharif es un sitio de sensibilidad musulmana sin par y el gobierno israelí está jugando con fuego,” dijo Mohamed Masalha, un profesor dirigente de una coalición de grupos islámicos dentro de Israel, que presentó el caso al tribunal.

En evidencia presentada al tribunal, Meir Ben Dov, un arqueólogo israelí y director de excavaciones en el Muro Occidental durante casi cuatro decenios, demostró que la tormenta había causado sólo un deslizamiento menor de tierra.

“El Gobierno me pidió que inspeccionara el daño dos días después de que ocurrió y vi que posiblemente una docena de piedras habían sido desplazadas,” dijo. “La rampa podría haber sido reparada en menos de una semana, pero en lugar de hacerlo decidieron demolerla.”

La jueza Arad, dijo el señor Ben Dov, había quedado “consternada” cuando vio las fotografías.

El señor Ben Dov dijo que su recomendación de que la rampa fuera reparada por 14.000 dólares fue ignorada por funcionarios israelíes, incluido Benny Elon, el ministro de Turismo de entonces, un rabino colono que dirige un partido de extrema derecha. En lugar de hacerlo el Gobierno demolió la rampa y construyó un puente provisional de madera a la Puerta Mughrabi mientras se realizaban excavaciones en el área abierta por la destrucción de la rampa.

El contralor de Jerusalén, Shulamit Rubin, la autoridad protectora de la ciudad, criticó en su época las excavaciones, diciendo que eran ilegales porque no se había solicitado las autorizaciones necesarias.

La naturaleza secreta de las excavaciones fue ampliamente considerada por grupos islámicos como evidencia de la intención israelí de buscar partes de los tempos destruidos. Con una evidencia semejante, Israel tendría una base más sólida para extender su control.

El carácter poco científico de las excavaciones se destacó a comienzos de 2007 cuando se supo que tres años antes arqueólogos israelíes habían desenterrado en el lugar una sala de oraciones musulmana del tiempo de Saladino, del Siglo XI, pero ocultaron el descubrimiento.

En febrero de 2007, cuando Israel llevó maquinaria pesada a las excavaciones de la Puerta Mughrabi, cientos de palestinos se enfrentaron a la policía mientras los movimientos islámicos dentro de Israel realizaban grandes manifestaciones. Yihád Islámico dijo que había disparado dos cohetes Qassam desde Gaza como reacción, y la Brigada de los Mártires de Al Aqsa amenazó con realizar ataques si no se detenía el trabajo.

Autoridades islámicas también expresaron temores de que la explanada de las mezquitas pudiera resultar dañada por las aplanadoras, y que la maquinaria pesada también podría destruir la aún no descubierta mezquita Al Buraq, que se pensaba que estaba ubicada cerca de la Puerta Mughrabi marcando el lugar donde el Profeta Muhammad ató su caballo durante su Viaje Nocturno entre la Meca y Jerusalén.

Para calmar la situación, Israel permitió que expertos turcos examinaran las excavaciones poco tiempo después. Éstos informaron de que Israel trataba de dejar de lado la historia islámica de Jerusalén para poder subrayar sus aspectos judíos.

Israel tenía otro motivo para seguir adelante con las excavaciones ilegales, dijo Kais Nasser, el abogado que representa a los grupos islámicos. “Tenían que desenterrar algo, cualquier cosa que pudiera presentar como una antigüedad para anular las demandas musulmanas de que se restaurara la rampa. La reconstrucción de la rampa sería entonces imposible porque podría dañar un emplazamiento arqueológico.”

Nasser dijo que Israel espera que si puede presentar el puente como la única opción factible, no habrá obstáculos para la expansión de la planicie de oraciones.

Ben Dov dijo que compartía esas sospechas sobre las actividades de Israel en el lugar, y agregó que parece que el objetivo de los funcionarios israelíes es obtener el control sobre todos los 480 metros de longitud del Muro Occidental.

Él y otros observadores han dicho que sólo es un ejemplo más de la antigua política de entrometerse gradualmente en el control musulmán de la explanada de las mezquitas.

Entre lo más significativo ha estado la creación de la Ciudad de David, un parque arqueológico israelí, directamente al sur de la mezquita Al Aqsa en el vecindario palestino de Silwan. El lugar está controlado por Elad, un grupo extremista de colonos que se ha apoderado de casas palestinas vecinas y, junto con la municipalidad de Jerusalén y funcionarios gubernamentales, presiona para que docenas más sean demolidas. Quiere llegar a vincular el parque con el Monte del Templo.

Los colonos judíos han estado concentrando sus esfuerzos en apoderarse de casas palestinas en el barrio musulmán, cerca de Haram al Sharif, con el apoyo de políticos derechistas, incluyendo en el pasado a Netanyahu.

Una organización de colonos, Ateret Cohanim, ha sido especialmente activa, y se sabe que está excavando bajo casas palestinas alrededor de la explanada a la espera de descubrir indicios de los templos.

“Lo que vemos en este caso es una alianza perversa de ministros del Gobierno, funcionarios de la municipalidad de Jerusalén y organizaciones de colonos que tratan de revivir una supuesta era dorada de soberanía judía de hace miles de años,” dijo Sweid.

Además, dijo, Israel cree que una presencia más significativa de Israel cerca de las mezquitas fortalecería su posición en cualequier conversaciones final de paz con los palestinos sobre la división de Jerusalén, ya que Israel podría presentar una reivindicación mayor de la soberanía sobre el lugar.

En las conversaciones de Camp David en el año 2000, Bill Clinton, entonces presidente de EE.UU., propuso dividir la soberanía de manera que Israel tuviera el control sobre los “espacios subterráneos” de la explanada de las mezquitas y el Muro Occidental. Durante las conversaciones Ehud Barak, el primer ministro israelí de la época, alarmó a los observadores al calificar toda la explanada de las mezquitas de lo “más sagrado de lo sagrado” de los judíos, un término que previamente sólo se había utilizado para referirse al santuario interior de los templos destruidos.

Hay otros temores entre los palestinos, y el mundo musulmán en general, de conspiraciones más tenebrosas que están tramando grupos aún más extremos.

Aunque leyes de la pureza religiosa judía han prohibido tradicionalmente a los judíos el ingreso al Monte del Templo, un número creciente de rabinos están pidiendo que se permita que los judíos recen en la explanada de las mezquitas. Se sabe que grupos aún más fanáticos están a favor de volar las mezquitas y construir un tercer templo en su lugar.

La reciente reconstrucción de la sinagoga Hurva ha aumentado esas preocupaciones. Los medios israelíes informaron de que, según una profecía rabínica de hace 300 años, la reconstrucción de la sinagoga anunciaría la construcción del tercer templo.

Un asunto sórdido: la limpieza étnica del sector Mughrabi

La limpieza étnica israelí del barrio Mughrabi, o marroquí, de la Ciudad Vieja de Jerusalén después de su captura en 1967 es uno de los episodios más sórdidos de la guerra de 1967.

Hasta que fue destruida por Israel en 2004, la rampa de piedra que llevaba a la Puerta Mughrabi –una de las principales entradas a la explanada elevada de mezquitas conocida como Haram al-Sharif– fue el único recuerdo visible de que el barrio, donde residían 1.000 palestinos, haya existido.

Al terminar la Guerra de los Seis Días, mientras tropas israelíes invadían la Ciudad Vieja, el gobierno israelí vio una oportunidad no sólo de restaurar una presencia judía en la ciudad amurallada sino de crear un nuevo barrio judío expandido que tendría el Muro Occidental en su centro.

Antes de 1948, las oraciones en el Muro habían sido posibles sólo en diversos puntos a lo largo de un estrecho corredor en los márgenes del densamente poblado barrio marroquí, un área legada en el Siglo XII a los seguidores de Saladino por su hijo Malik al-Afdal.

Pero inmediatamente después de la “milagrosa” victoria de 1967, el gobierno israelí vio la posibilidad de crear una amplia planicie para oraciones frente al Muro, convirtiéndolo en el corazón simbólico de un Estado judío expandido que podría unir a judíos religiosos y seculares.

Todo lo que estaba en el camino eran las 135 casas del barrio.

En la noche del 10 de junio, Uzi Narkiss, jefe del comando central del ejército, autorizó que 15 equipos privados de demolición arrasaran el barrio bajo cobertura de la oscuridad. Él, como los políticos, sabía que ni la comunidad internacional ni los tribunales israelíes consentirían una violación tan flagrante del derecho internacional.

Cuando Teddy Kollek, el alcalde de Jerusalén Occidental, consultó al ministro de Justicia, la respuesta fue: “No sé cuál es el estatus legal. Hágalo rápidamente y que el Dios de Israel lo apoye.”

Uzi Benziman, periodista israelí, describió la compulsión “casi mística” que impulsaba a los responsables de ese acto de limpieza étnica: “Los oficiales y los contratistas se consideraban emisarios venidos a renovar la condición del Estado judío como había sido 1.897 años antes.”

Un oficial fue de casa en casa ordenando a los residentes que las evacuaran. Según observadores, los que se negaron terminaron por huir cuando cayeron las murallas de sus casas. Una anciana, encontrada entre los escombros, murió poco tiempo después.

Cuando se removieron los escombros y se allanó el suelo para crear una amplia planicie frente al Muro Occidental, los contratistas recibieron instrucciones de utilizar los escombros de las casas para construir una rampa hasta la Puerta Mughrabi. La puerta es la única entrada a la explanada de las mezquitas para la cual Israel conservó la llave. Hoy es el punto de acceso para todos los visitantes no musulmanes, incluida la policía israelí.

El Muro Occidental y la planicie, en tierra que previamente estaba controlada por las autoridades islámicas, fueron colocados bajo la jurisdicción del ministro de Asuntos Religiosos israelí. Pocos días después, en el día santo judío de Shavuot, se calcula que 200.000 judíos israelíes –uno de cada 10 de la población– fueron a visitar el Muro.

Aunque Israel había efectivamente anexado Jerusalén Este, sus dirigentes seguían preocupados por las posibles repercusiones internacionales de que los vieran tomando el control de los sitios sagrados de la Ciudad Vieja, especialmente la explanada de las mezquitas. Bajo un denominado acuerdo de “statu quo” se suponía que funcionarios musulmanes seguirían controlando la explanada de las mezquitas, bajo supervisión israelí.

Pero eso no impidió la rápida emergencia de un movimiento en Israel que buscaba también el control de la explanada de las mezquitas. Muchos judíos creen que las ruinas de los templos de Salomón y Herodes se encuentran bajo las mezquitas.

Desde comienzos de los años setenta, rabinos extremistas –encabezados por Shlomo Goren, entonces gran rabino de Israel– comenzaron a presionar para que los judíos pudieran ingresar a la explanada para orar, a pesar de fallos rabínicos tradicionales contra una práctica semejante.

Pronto aparecieron grupos judíos exigiendo más: que se volaran las mezquitas a fin de hacer sitio para un tercer templo que acercaría la llegada del Mesías.

Desde el estallido de la segunda Intifada, queda poco del acuerdo de statu quo. Restricciones israelíes de movimiento que afectan a Gaza y a Cisjordania significan que actualmente sólo una ínfima cantidad de palestinos puede llegar a las mezquitas. También se prohíbe la actividad de instituciones palestinas dentro de Jerusalén.

Mientras tanto, los colonos y funcionarios israelíes han usurpado cada vez más tierra alrededor de la explanada de las mezquitas. En las conversaciones de Camp David con los palestinos en el año 2000, Israel propuso por primera vez que se permitiera a los judíos la oración en la explanada y que Israel tuviera un grado de soberanía sobre el lugar.

En los últimos años la policía israelí ha comenzado a escoltar a los judíos dentro de la explanada a través de la Puerta Mughrabi, aunque las oraciones no se han aprobado hasta ahora.

…………

Jonathan Cook es un periodista y escritor que trabaja en Nazaret, Israel. Sus últimos libros son Israel and the Clash of Civilisations: Iraq, Iran and the Plan to Remake the Middle East (Pluto Press) y Disappearing Palestine: Israel's Experiments in Human Despair (Zed Books). Su sitio en Internet es: www.jkcook.net.

Una versión de este artículo apareció originalmente en The National (www.thenational.ae), en Abu Dabi.



Fuente: http://www.counterpunch.org/cook03262010.html

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=103140

sábado, 27 de marzo de 2010

Del horror a la memoria.

Photobucket

Por Osvaldo Bayer

Regreso a las tierras que a uno lo vieron nacer. De allí al primer acto de nuestra realidad: en la ESMA, presentación del libro Historia del Terrorismo de Estado en la Argentina. La inesperada fantasía de la realidad. La historia de toda la crueldad presentada en el antro de la máxima y cobarde ignominia de nuestra historia. Que cometieron las denominadas Fuerzas Armadas. En este caso la marina de guerra, de uniforme azul, camisa blanca y manchas de sangre que nunca podrán borrar. Massera, Astiz y algunos apodados “tigres”, sí, tigres que atacaron a Madres que llevaban como única arma pañuelos blancos en sus cabezas. La ESMA, un antro de perversión absoluta, donde se pisoteó la nobleza humana en todas sus ideas y generosidades. Antes de preguntar “¿Qué nos pasó a los argentinos desde aquellos generosos llamados del 25 de Mayo de 1810?”, me paseo por esos patios. Auschwitz, ESMA. Pienso en esas tres primeras Madres: Azucena, Mary y Esther, tiradas en el suelo durante el invierno, en un calabozo para una sola persona, sin mantas para cubrirse. Y, después, llevadas a un avión de la “gloriosa” marina de guerra argentina y arrojadas con vida al mar. La máxima hazaña de nuestros marinos en su historia contemporánea.

La ESMA. Ahora un ámbito para la cultura, el debate de las ideas, el recuerdo de las acciones a fin de lograr el “Nunca Más” para nuestros hijos, nietos y todas las generaciones que habiten en una tierra que sea sede de la paz eterna y el respeto por la vida.

La lucha de las Madres ha convertido a la ESMA de la más siniestra mazmorra de nuestra historia en una casa del saber y la esperanza. Camino por sus patios. Me encuentro con el Walsh aquel de los fraternos abrazos. Pienso: aquí respiró su último aire de vida. Mataron la mente más clara, la mano más generosa. La esperanza con seis alas. Astiz (en ese nombre está todo dicho. No falta agregar nada a la infamia. Sólo basta pronunciarlo para darnos cuenta y poder definir lo que es la suciedad, lo sucio, la basura).

Dialogo en silencio con Rodolfo frente al casino de oficiales, el lugar maldito de los prisioneros. Me dice que está preparando un coro de ángeles que vendrán a la tierra criolla a devolverles las tierras comunitarias a los pueblos originarios. Le quiero advertir de los peligros, que modere un poco su idealismo, pero no me escucha y me dice que luego bajará con otro coro de ángeles negros que harán la reforma agraria en las pampas que Roca manchó de sangre para siempre... Me quedo mudo, lo veo alejarse, y desde lejos me convence: “Vendrán con música, danza y tambores”, me dice. Espantados pasan en ese instante unos fantasmas con rostros asesinos y uniforme. Oigo que uno dice: “El tipo ése todavía no aprendió nada”.

Me convenció, Rodolfo, sigue siendo el mismo, me digo. Pienso en aquellos que marcaron rumbos y cuyo recuerdo queda para siempre. Y en los destructores, los que quedan en el sótano del Mal, del egoísmo, los torturadores de la sonrisa.

El exilio. Me toca en Córdoba presentar el libro de Norberto Negro La vuelta al mundo en varias vidas. Los nietos de los inmigrantes vuelven a la tierra de los antepasados como exiliados. La melancolía. El comenzar todo de nuevo. O no. El resignar. O no.

Después aprovecho para recorrer las calles que caminó Tosco en el Cordobazo. Puro coraje civil. El honesto por excelencia que quería terminar con el juego de la politiquería y de la humillación. Agustín Tosco. Córdoba tiene para siempre a su Héroe del Pueblo. A su Hijo del Pueblo, como llamaban los libertarios a quienes daban todo por la solidaridad.

Sigo por las calles cordobesas. Me sale al encuentro un grupo de obreros de Fiat-Iveco. Están muy tristes y con bronca. Me relatan el caso del delegado Hernán Puddu. Me dan detalles: La empresa Iveco despidió el año pasado a la totalidad del personal “contratado”, alrededor de 350 obreros. El delegado Puddu consideró que los obreros “contratados” tienen el mismo derecho que los obreros “efectivos”. Comenzó entonces la lucha por la fuente de trabajo. Los despedidos fueron acompañados en las manifestaciones por sus mujeres, que jugaron un papel protagónico. La empresa reaccionó y suspendió a Puddu. La Justicia cordobesa falló a favor del delegado, pero la empresa no lo aceptó. Y no le permitió llevar a cabo sus tareas gremiales. Y aquí ocurre lo increíble. El sindicato no lo defiende a Puddu, lo deja solo. Realidades sindicales argentinas. “Internas”, que le llaman. Y luego, lo impensado: en un congreso de San Luis, el sindicato Smata expulsa a Puddu. Se basan en que Puddu no había firmado la aceptación de los despidos de los “contratados”, pero el sindicato, sí. Se habla de “relaciones carnales” entre el sindicato y la empresa. El secretario general de Smata Córdoba, Omar Dragún, acusa a Puddu de “volver a instalar el caos en la Argentina” y además de estar “vinculado con los derechos humanos”. Los obreros que me hablan me dicen que muchos de los “señores dirigentes sindicales” hoy viven en countries.

Creo vivir una fantasía de la realidad. Que en Córdoba, la ciudad de Agustín Tosco, la ciudad del Cordobazo, ocurran estas cosas, no, no, y murmuro una vez más: “Pero ¿qué nos pasa a los argentinos?” (por otra parte, como detalle imperdible, la empresa apoya al campeonato mundial de fútbol, tal cual se hizo en la dictadura del ’78. Un detalle, apenas, pero para bajar la cabeza).

El delegado Puddu ha recurrido al Inadi (Instituto Nacional contra la Discriminación) y a la Justicia. Mientras tanto, Puddu es apoyado por organizaciones de derechos humanos y también por bibliotecas populares.

Nuevamente pienso: del Cordobazo, del gremio Sitrac-Sitram, a esto. Sí, fantasías de nuestra realidad. Pero realidad al fin. Nos ponemos tristes. La ética también tiene que ser respetada por el sindicalismo entronizado. Debe defender que hombres dignos como Puddu sean protagonistas en la vida gremial. Sólo así se logrará dignidad y no con los enjuagues y las jugarretas seudojudiciales destinadas a mantener las distancias en la sociedad.

Vuelvo a Buenos Aires y me toca ser uno de los oradores que va a defender el proyecto del intelectual argentino Marcelo Fabián Monges –que vive en México– acerca de una propuesta para penalizar el golpe de Estado como delito jurídico internacional y de una convención contra los golpes de Estado. Aquí se ha tenido como ejemplo el golpe de Estado en Honduras donde la OEA y la ONU condenaron ese golpe en una actitud sin precedentes. Y también que, tanto a los golpistas como a sus colaboradores se los detenga cuando salen al exterior y se les haga juicio por delito de lesa humanidad. Nunca más dar refugio a los autores de asesinatos políticos, prisiones por ideología, torturas, crímenes, desapariciones, todo eso engendrado en los golpes militares –casi siempre impulsados por los poderes económicos– que han llevado la tragedia a naciones que convivían en paz y democracia.

De llevarse a la realidad este proyecto de Monges las democracias adquirirían más seguridad en sus instituciones. Sería un primer paso. El ejemplo argentino es clásico. Las Fuerzas Armadas han arrasado el poder democrático catorce veces en su historia terminando con los derechos de todos sus habitantes. La última vez culminó con uno de los métodos criminales más sádicos de la historia de la humanidad. Claro está que golpe es todo aquello que se hace desde el poder militar o desde el poder económico y no las reacciones populares en pos de más justicia social. Aquellos golpes trajeron no sólo la muerte, cárcel o exilio para los que resistieron sino que también sirvieron para cancelar los derechos de reunión, de asociación, de información, de libre expresión y la quema de libros. Por supuesto que esto no quiere decir que el habitante de un país gobernado por una dictadura renuncie a la resistencia esperando la reacción del exterior. No, este proyecto les da más fuerza a todos aquellos que no aceptan órdenes dictatoriales.

Un proyecto que debería debatirse en todas las universidades del país, en los centros culturales y barriales, en organizaciones sindicales y, principalmente, en los partidos políticos, los cuales deberían designar a un responsable para que lo lleve adelante.

Se abre una esperanza para el coro de ángeles que nos prepara Rodolfo.

http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-142765-2010-03-27.html

La Iglesia no se equivoca.

Photobucket

Por Washington Uranga

Los casos de pedofilia en la Iglesia Católica se han multiplicado a tal punto que ya rozan el prestigio del propio Benedicto XVI. Si bien por el momento no hay evidencias ciertas que permitan probar las acusaciones sobre encubrimiento, sí existen sospechas fundadas acerca de la verosimilitud de lo que se denuncia. El Vaticano reaccionó institucionalmente, descartando toda posibilidad, calificando de “innobles” las versiones y hablando de “ensañamiento” contra el Papa. El cardenal José Saraiva Martins, ex prefecto (ministro) de la Congregación para la Causa de los Santos, no se detuvo ahí, sino que recurrió al tan reiterado como insostenible argumento de que todo no es más que una “conspiración” contra la Iglesia.

Más allá de la discusión puntual en torno de la responsabilidad del papa Ratzinger en los casos que se ventilan, es evidente que en la Iglesia Católica de todo el mundo rige un mecanismo de funcionamiento corporativo para encubrir estas y otras aberraciones cuando ellas existen y, en particular, cuando los responsables son miembros del clero o de la jerarquía. En todos los casos la explicación ha sido la de proteger “la imagen” de la Iglesia. Una y otra vez, se dice y se reitera que se trata de “errores”, “pecados” o “fallas” de algunas personas. Nunca se asumen responsabilidades institucionales. No se afirma explícitamente, pero se da por sentado que “la Iglesia no se equivoca”.

Así ha ocurrido también en Argentina con los casos comprobados de abuso sexual en los que fueron protagonistas el cura Julio César Grassi y el ex arzobispo de Santa Fe Edgardo Storni. Y no son los únicos, sino apenas los más mediáticamente resonantes.

Una pregunta posible es si no hay en la institución eclesiástica católica la capacidad suficiente para revisar su cultura organizativa, las formas y los hábitos, también las disposiciones disciplinarias para determinar si existen o no en su propio seno condiciones que facilitan este tipo de aberraciones. Aún ahora en la Iglesia se sigue repitiendo el procedimiento por el cual el mayor “castigo” que recibe un cura sospechado de abusos sexuales es trasladarlo en silencio a una parroquia lejana... donde seguramente seguirá cometiendo las mismas tropelías porque sus nuevos parroquianos nunca son advertidos de la peligrosidad de quien ha llegado desde lejos, enviado como nuevo pastor. El traslado será seguramente toda la “sanción”. Y no hay ni reflexión ni autocrítica institucional. Sólo debates entre paredes y golpes de pecho de puertas adentro, en el ámbito recóndito de alguna sacristía.

Se podrá decir que los casos de abuso no existen sólo en la Iglesia. Es verdad. Pero no sirve como argumento. Entre otros motivos porque es también evidente que por este camino la institución eclesiástica incurre en una gruesa contradicción entre aquello que predica como doctrina y la práctica de muchos de sus ministros y representantes.

¿Por qué insistir entonces en esa suerte de “blindaje” institucional que no admite errores y que todo lo ve como conspiraciones? Habrá que recordar con qué vehemencia la Iglesia defendió al sacerdote mexicano Marcial Maciel, fundador de la ultraderechista y conservadora congregación mexicana de los Legionarios de Cristo, negando todas las acusaciones en su contra, hasta que finalmente quedó demostrada la perversidad de su conducta a través de reiterados abusos sexuales a menores. Mientras vivió Maciel fue uno de los hombres más protegidos y reconocidos por Juan Pablo II. ¿No habría sido mejor revisar, pedir perdón, resarcir a las víctimas, sanear y corregir todo lo necesario? ¿Las evidencias mueven a hacerse otras preguntas? ¿Nadie lo cree necesario?

“Doctores tiene la santa madre Iglesia”, reza un dicho común en el catolicismo. Sólo a ellos les corresponde adoptar las decisiones institucionales. Pero mientras tanto, es evidente que el deterioro de la imagen de la Iglesia Católica es cada día más acelerado por hechos delictivos comprobados. Por cierto que lo que menos debería preocupar es la imagen sino la flagrante contradicción entre la prédica y la práctica. Esto es en definitiva lo más grave y lo que, lejos de corregirse, se abona con los silencios, las negaciones infundadas y las denuncias de conspiraciones que nadie puede acreditar.

http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/subnotas/142757-45944-2010-03-27.html

¿Es la Iglesia una organización criminal?

Photobucket

Un abogado austríaco plantea la posibilidad de perseguir judicialmente a la institución misma

Die Presse (Austria)

Traducido por Anahí Seri


Un abogado está estudiando denunciar a la Iglesia por la “posibilidad de que constituya una organización criminal”. Al mismo tiempo, se están concretando las exigencias de que los casos de abusos se investiguen por parte del Estado.
Viena. El abogado economista Georg Zanger se plantea dar nuevos pasos en la lucha contra los abusos en instituciones católicas. “Habría que pensar en presentar denuncias contra organizaciones de las instituciones eclesiásticas por la posibilidad de que se trate de organizaciones criminales.” Este denuncia se basaría en el artículo 278a del Código Penal austríaco e iría dirigida a la fiscalía.

Son justamente estos antecedentes de hecho (con amenaza de 6 meses a 5 años de prisión) los que actualmente se les imputan, en un proceso en curso en Wiener Neustadt, a 13 defensores de los derechos de los animales. Zanger opina: “Pienso que el artículo 278 no está pensado exclusivamente para defensores de los animales.” En su opinión, ahora habría que estudiar hasta qué punto hay una conducta organizada detrás de los ocultamientos que ha habido, y por tanto detrás de la violencia y los abusos sexuales.

Zanger explica: “Si hay un solo educador detrás de los abusos, la situación es muy distinta de si estos hechos se han producido con el consentimiento de otros.” Si en alguna de las instituciones resultara que los abusos son “inherentes al sistema”, estaría justificada una denuncia conforme al artículo 278a del Código Penal austríaco.

Hasta el momento, hay 15 personas que se han asociado para pedirle ayuda a Zanger, quien también quiere actuar en otro frente. Hace años, ya consiguió indemnizaciones en cantidades millonarias como abogado de víctimas del nazismo que habían sido obligados a trabajos forzados. Ahora podría actuar como defensor para las víctimas de violencia y abusos de la Iglesia. Opina que, en el caso de la Iglesia, a la larga no tiene mucha importancia el que las demandas hayan prescrito.

Algunas víctimas también están pensando en reclamar indemnizaciones de las diócesis. Según informaciones de este periódico, se va a estudiar también una denuncia contra el cardenal Christoph Schönborn en cuanto responsable de la archidiócesis de Viena. Ahora bien, al margen de la cuestión de que los hechos hayan prescrito o no, a un obispo sólo se le podría demandar en su calidad de superior jerárquico si se pudiera demostrar que él debía tener “muy claro” que era previsible que el autor iba a seguir cometiendo delitos, como explica el especialista en derecho Helmut Fuchs.

¿Y cómo está el asunto de las indemnizaciones en cuanto al derecho civil? ¿Quién tiene la responsabilidad: el obispo, la diócesis? En opinión del experto en derecho privado Andreas Kletecka, sería muy difícil demandar a un obispo. Otra cosa es lo de las diócesis. Si el autor de los delitos es un sacerdote, se le debe considerar como representante de un organismo, la diócesis, contra la cual se podrían presentar demandas de indemnización. Hay un problema, que es que para personas jurídicas las demandas prescriben a los tres años. Para los autores del delito, hay un plazo de treinta años. La opinión de Kletecka sobre esta ventaja de la que gozan las personas jurídicas: “ahora mismo, el asunto se está debatiendo, está 50 - 50.” Es posible que el Tribunal Supremo modifique la judicatura y amplíe el plazo de prescripción hasta los treinta años.

Mientras tanto, se están concretando las exigencias de que los casos de abusos se investiguen por parte del Estado. Por una parte, se dice que hay que hablar tanto con los representantes de las víctimas como con la Iglesia. Jarolim, portavoz de justicia del SP (partido socialdemócrata), especifica más. Él pide una comisión de investigación constituida por cinco personas, que debería dirigir un presidente anterior del Tribunal Constitucional. A dos representantes los debería nombrar la Iglesia, y a otros dos las organizaciones de víctimas, afirmó Jarolim en televisión. La archidiócesis de Viena se muestra de acuerdo. Su portavoz Erich Leitenberger dijo que se cooperará al máximo con las instituciones del Estado.

El ejemplo lo constituye Irlanda, donde ya se constituyó hace años una comisión de investigación en materia de abusos. Y también en Alemania: allí se ha formado ahora una mesa redonda sobre abusos infantiles, y se ha nombrado a la socialdemócrata Christine Bergmann como representante del Gobierno. La plataforma “Afectados por la violencia de la Iglesia” apoyan la idea de una comisión estatal. La plataforma ofrece desde el martes un número de teléfono de ayuda a las víctimas.

Por otra parte, la diócesis Gurk-Klagenfurt piensa recurrir, a partir de ahora, a las instancias estatales ante cualquier sospecha de abuso o maltrato. Si bien el derecho penal no establece en general la obligación de declarar los hechos, el obispo Alois Schwarz esclarecerá los hechos incluso en los casos que ya hayan prescrito de acuerdo con el derecho penal.

Fuente: http://diepresse.com/home/panorama/religion/548442/index.do?_vl_backlink=/home/panorama/religion/544836/index.do&direct=544836


http://www.rebelion.org/noticia.php?id=103017

jueves, 25 de marzo de 2010

Romper esquemas.

Photobucket

por Néstor Pedraza.

Entre las cosas que suenan poco creíbles pero son estadísticamente incontestables, está el hecho de que la caída de las Torres Gemelas aquel famoso 9/11 de 2001, disparó el interés de los jóvenes estadounidenses y europeos por saber más del Islam. Quizá inicialmente les parecía increíble (o tal vez fascinante) que hubiera en el mundo un enorme grupo de personas dispuestas a matarse por su Dios. Luego se habrán decepcionado un poco al saber que eso no es Islam, que para los musulmanes el suicidio es un pecado grave, así como el asesinato de civiles inocentes, de no-combatientes. Después, tal vez, hasta sintieron algo de ira cuando comenzaron a comprender la estrecha relación entre la familia Bin Laden (y la corrupta monarquía saudita que depende de ella) y la familia Bush con sus negocios petroleros, y su consecuente subordinación a los intereses gringos. Algunos, es probable, habrán llegado a sentir pánico al descubrir que Osama Bin Laden fue entrenado por la CIA, al igual que el actual presidente de Afganistán; y que tanto ellos como Saddam Hussein fueron aliados del gobierno de los Estados Unidos, que les envió armas, entrenamiento, asesoría militar y les brindó protección y apoyo.


En fin: tratar de saber sobre el Islam más allá de lo que les contaba la CNN, les abrió un mundo que desconocían por completo. Un mundo que les resultó más cercano de lo que imaginaban, cuando encontraron que el Islam habla también de las historias y los profetas que aparecen en la Biblia y que Jesús (AS) es reconocido como el Mesías de Israel por los musulmanes. Al tiempo, comenzaron a ver su propio mundo más distante, más extraño, un mundo de mentiras y de posibles conspiraciones. Las inconsistencias que han presentado siempre las versiones oficiales sobre lo ocurrido el 9/11, la farsa de la persecución de Osama Bin Laden, las atrocidades cometidas por el ejército estadounidense en Afganistán, y las falacias descaradas de la administración Bush para justificar la invasión a Iraq, llevaron al desarrollo de todo tipo de teorías de conspiraciones. Teorías que van de las francamente absurdas (lo que se estrelló contra las torres no eran aviones, sino misiles disfrazados de aviones gracias a tecnología de hologramas, dice una de ellas), a las que algunos científicos han definido como únicas explicaciones razonables, pero están en debate (las torres fueron derribadas por una demolición controlada, dice una de ellas), pasando por lo que ya se ha confirmado (el FBI tenía conocimiento previo de que se preparaba el ataque, por ejemplo). Las dudas que todo esto ha generado en el público (tanto el estadounidense como el mundial) conllevaron a la formación de varias agrupaciones y organizaciones que claman porque se revele la verdad detrás del 9/11, entre ellas la Muslim-Jewish-Christian Alliance for 9/11 Truth - MUJCA (Alianza Musulmana-Judía-Cristiana por la Verdad del 9/11), que afirma en su página principal:


La misión de la Alianza es llegar a las personas de fe para:



Compartir con ellas las extensas investigaciones que han mostrado que la historia oficial no puede ser verdad y que una nueva investigación es necesaria, a fin de lograr justicia para todas las víctimas del 9/11.

Alentarlas a ver la inmoralidad de usar una historia falsa como base para invadir países, infligir torturas, negar las libertades civiles, manejar una falsa cuña entre Musulmanes y otras religiones, y crear un clima de temor en los Estados Unidos y el mundo.

Reconocer que si las comunidades de fe deben ser la conciencia del estado, basarse en fuentes de noticias que están fuertemente influenciadas por el estado no puede ser un medio confiable para la evaluación independiente.

Entender que la elección que enfrentamos como personas de Dios es entre la lealtad a Dios y la lealtad al imperio.

Hacer todo lo anterior tratando de decir la verdad con amor.



La estadounidense MUJCA debería llamarse más bien “Asociación Musulmana-Sufi”, pues fue creada por el Dr. Kevin James Barrett (doctor en Islamología y Arabología, miembro de Académicos por la Verdad del 9/11 y del Comité Científico para la Investigación del 9/11, cristiano unitario convertido al Islam) y por el Dr. Faiz Khan (médico cirujano, sufí, miembro del Comité de Ética del Centro Médico de la Universidad de Nassau), y no aparece avalada ni respaldada por ninguna organización islámica, judía o cristiana (ni siquiera por alguna organización sufí). Sin embargo, sus fundadores son dos de los activistas más conocidos y entusiastas de cuantos defienden las teorías de conspiraciones en relación a los ataques del 9/11, y la sola existencia de la MUJCA forma parte de esas extrañas mezclas, alianzas y sincretismos que se están dando en occidente, como consecuencia de la influencia aún débil pero en expansión del Islam, en confrontación con la tradición judeocristiana que subyace en todos los aspectos de la mentalidad europea y americana.


De modo que del 9/11 se ha derivado un mayor conocimiento del Islam entre algunos sectores de las sociedades europeas y estadounidense, una mayor necesidad de establecer diálogos entre los creyentes (véase la nota El diálogo entre cristianos y musulmanes, visto con ojos de mujer), y un crecimiento progresivo en el número de personas de dichas sociedades que deciden declararse musulmanes y vivir de acuerdo a la ley coránica. El Pew Research Center (entidad independiente que a través de encuestas, foros y estudios en ciencias sociales, provee información sobre problemas, actitudes y tendencias que se perfilan en los Estados Unidos y el mundo) reportaba en mayo de 2007 que el 35% de los musulmanes en Estados Unidos eran estadounidenses de nacimiento, con un 21% de conversos y sólo un 14% de hijos de musulmanes inmigrantes. Se estimaba en ese momento en 2.35 millones de personas el número de musulmanes en Estados Unidos (tomado de http://pewresearch.org/pubs/483/muslim-americans). Sin embargo, el 53% de los musulmanes en Norteamérica se ha quejado de que su vida es más difícil tras el 9/11. De hecho, en septiembre de 2009, el mismo Pew Research Center ha publicado datos según los cuales, los estadounidenses consideran que los musulmanes son el grupo religioso más discriminado en Norteamérica (58%) seguido de lejos por los judíos (35%), cristianos evangélicos (27%) y ateos (26%). A pesar de ello, la percepción entre los estadounidenses de que el Islam fomenta la violencia más que otras religiones, ha bajado del 45% al 38% entre 2007 y lo que va corrido de 2009 (tomado de http://pewresearch.org/pubs/1336/perceptions-of-islam-religious-similarities-differences).

Por supuesto, el crecimiento del Islam en Europa y Estados Unidos es entendido por varios sectores como una amenaza para el statu quo, y esto ha traído como consecuencia un aumento en los ataques contra el Islam en forma de mala propaganda, permanentes alusiones noticiosas a países árabes como focos de barbarie, exageración de noticias árabes negativas (incluso de árabes no-Musulmanes) mostradas como "acciones propias de todo Musulmán" (menos del 18% de todos los Musulmanes del mundo son árabes), racismo, xenofobia, islamofobia, intolerancia cultural, y por supuesto, en un ataque religioso desde muchos púlpitos, altares, sinagogas y sitos de Internet.


Todo esto ha favorecido y dado sustento a la mal llamada “guerra contra el terrorismo”, que no es más que la justificación que requería la industria militar y de inteligencia norteamericana para mantener y aumentar su presupuesto tras la caída del socialismo soviético. Muerto el diablo, necesitaban satanizar a alguien o algo más, lo suficientemente grande para que fuera percibido como una amenaza igual o mayor que el comunismo. Por supuesto, la “guerra contra el terrorismo” no está diseñada para impedir el genocidio de Israel contra Palestina, ni para evitar el terrorismo de estado en países como Colombia, donde las violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario por parte de las fuerzas del estado y de sus aliados paramilitares, son tan flagrantes como la infiltración del narcotráfico en todas las esferas del estado y de la sociedad. Ni siquiera las FARC, señaladas como grupo terrorista por los Estados Unidos, son blanco de los esfuerzos de la “guerra contra el terrorismo”. No, esa es una guerra dirigida específicamente contra los pueblos árabo-musulmanes que habitan inermes e inocentes en territorios donde los estadounidenses tienen intereses petroleros y geoestratégicos.

A pesar de todo, el crecimiento del Islam se mantiene. De acuerdo al artículo Lejos de extinguirse, un estudio confirma el auge de las religiones:


En 2050, el cristianismo pasará los 3.000 millones de fieles y seguirá siendo la primera comunidad religiosa mundial. Pero el Islam -que llegará a los 2.229 millones- será el que, proporcionalmente, más crecerá.


Según la nota Casi una de cada cuatro personas es musulmana, "Europa es el hogar de 38 millones de musulmanes [...] hay más musulmanes en Alemania que en el Líbano y más en Rusia que en Jordania y Libia juntas [...] más de la mitad de los 4,6 millones de musulmanes en el continente americano viven en Estados Unidos", y de más de 1500 millones de musulmanes en el mundo, "300 millones [...] viven en países donde el Islam no es la religión mayoritaria".

En este crecimiento, por supuesto, se presenta un número cada vez mayor de “conversiones” de cristianos y, en menor medida, de judíos al Islam (Islam significa “sumisión a la voluntad de Dios”, los musulmanes consideramos que todo ser humano nace musulmán, nada hay en los actos de un niño que contradiga la voluntad divina, por lo que no hablamos de “conversión” al Islam sino de retornar a la condición primera del ser humano, volver al Islam). Dichas "conversiones" o retornos implican un proceso de cambio en el que la persona, a medida que conoce y entiende más el Islam, va transformando no sólo sus actitudes, costumbres y creencias, sino su visión del mundo y su forma de pensar. Es un verdadero proceso de romper esquemas a todo nivel. La velocidad con que ese proceso se desarrolla depende de cada persona, y en algunas es posible que nunca se lleve a cabo del todo, debido a su incapacidad de desprenderse de costumbres, tradiciones y creencias aprendidas desde la cuna y cultivadas con ahínco durante décadas. Esto puede compararse con dejar de fumar: para algunos es muy sencillo (un amigo mío, una noche cualquiera, arrugó su segundo paquete diario de cigarrillos, que recién había abierto, y lo lanzó a la basura; de eso hace más de 20 años, nunca volvió a fumar), pero para otros es casi imposible. Al respecto, nos dice el Dr. Jerald F. Dirks (master en Divinidad de la Harvard Divinity School, exministro de la Iglesia Metodista Unida de Estados Unidos, doctor con maestría en psicología clínica de la Universidad de Denver, musulmán desde 1993):


El sentido de identidad, de quién uno es, es una poderosa afirmación de la posición que tenemos en el cosmos. En mi práctica profesional, ocasionalmente me llamaban para tratar ciertos desórdenes adictivos, que iban desde fumar, al alcoholismo o al abuso de las drogas. Como clínico, sabía que la adicción física básica tenía que ser superada para crear la abstinencia inicial. Esa era la parte fácil del tratamiento. Como dijo Mark Twain una vez: “Dejar de fumar es fácil; yo lo he hecho cientos de veces”. Sin embargo, también sabía que la clave para mantener esa abstinencia durante un largo período de tiempo era superar la adicción psicológica del paciente, la cual se basa fuertemente en su sentido básico de identidad, es decir, el paciente se identificaba como “fumador”, o como “bebedor”, etc. El comportamiento adictivo se había vuelto parte del sentido básico de identidad del paciente, o de su sentido básico del ser. Cambiar ese sentido de identidad era esencial para mantener la “cura” psicoterapéutica. Esa era la parte difícil del tratamiento. Cambiar el sentido básico de identidad de una persona es la tarea más difícil. La psiquis de la persona tiende a aferrarse a lo viejo y conocido, lo cual parece más cómodo y seguro psicológicamente que lo nuevo y poco conocido.

En un sentido profesional, tenía el conocimiento [del Islam] descrito, y lo utilizaba a diario. Sin embargo, irónicamente, no estaba listo para aplicarlo conmigo mismo ni tampoco con el tema de mis propias dudas respecto a mi identidad religiosa. Durante 43 años, mi identidad religiosa había sido cuidadosamente caratulada de “cristiana”, por más numerosos que hayan sido los calificativos que le haya agregado al término a lo largo de los años. Dejar de lado la etiqueta de mi identidad personal no fue una tarea fácil. Era parte esencial de cómo definía mi propio ser. Dado el beneficio de la duda, queda claro que mis dudas servían al fin de asegurarme de mantener mi identidad religiosa familiar de ser cristiano, aunque cristiano que creía como musulmán.

Ya estábamos a fines de diciembre, y mi esposa y yo estábamos llenando los formularios para obtener los pasaportes estadounidenses, para así hacer realidad un viaje al Medio Oriente. Una de las preguntas tenía que ver con la afiliación religiosa. Ni siquiera lo pensé y automáticamente caí en lo habitual y familiar, y escribí “cristiano”. Fue fácil, fue conocido y fue cómodo.

Sin embargo, esa comodidad se vio alterada momentáneamente cuando mi esposa me preguntó qué había puesto en la parte de identidad religiosa del formulario. Inmediatamente respondí “cristiano”, y me reí fuertemente. Ahora, una de las contribuciones de Freud a la comprensión de la psiquis humana fue su interpretación de que la risa es a menudo una liberación de tensión psicológica. […] Me apresuré a darle a mi esposa una breve afirmación de que era cristiano, no musulmán. En respuesta a ello, me informó amablemente que sólo me estaba preguntando si había escrito “cristiano”, “protestante” o “metodista”. En un sentido profesional, sé que una persona no se defiende de una acusación que no le han hecho. (Si durante una sesión de psicoterapia, mi paciente vocifera “No estoy enojado con eso”, y yo ni siquiera mencioné el tema del enojo, queda claro que mi paciente sentía la necesidad de defenderse de una acusación que le hacía su propio inconsciente. Es decir, estaba enojado, pero no estaba listo para admitirlo o enfrentarlo). Si mi esposa no había hecho la acusación, o sea “eres musulmán”, entonces la acusación provenía de mi propio inconsciente, pues yo era la única persona presente. Estaba al tanto de ello, pero seguía vacilando. La carátula religiosa que se había apegado a mi sentido de identidad durante 43 años no iba a despegarse fácilmente. […]

Imán, una musulmana estadounidense […], amablemente me preguntó si era musulmán. La palabra que salió de mi boca antes de pensar en cualquier amabilidad o regla de cortesía social fue: “¡No!”. Esa sola palabra fue pronunciada con fuerza y con más de un dejo de irritabilidad. […] ¿Qué me estaba pasando? Me había comportado agresiva y maleducadamente. ¿Qué había hecho esta mujer para merecer mi reacción? Ese no era yo. […] Podía hacer de cuenta que ignoraba mi propia risa como una tensión liberada, pero no podía comenzar a ignorar esta suerte de comportamiento reprochable de mi parte. […] Más tarde, […] intenté [disculparme con Imán] diciendo: “Temo que fui un poco brusco en responder su pregunta hace un rato. Si usted me hubiera preguntado si creo que existe un solo Dios, entonces mi respuesta sería sí. Si me hubiera preguntado si creo que Mujámmad fue uno de los profetas de ese único Dios, entonces mi respuesta sería sí”. Ella fue muy amable y dijo: “Está bien, a algunas personas les lleva más tiempo que a otras”.

Quizás, los lectores de estas palabras serán lo suficientemente amables para notar los juegos psicológicos que estaba jugando conmigo mismo sin reírme fuerte con mi gimnasia mental y mi comportamiento. Sabía bien que a mi propia manera, utilizando mis propias palabras, acababa de decir la Chajada, el testimonio islámico de fe, es decir: “Atestiguo que no existe dios excepto Dios, y atestiguo que Mujámmad es el mensajero de Dios”. Sin embargo, a pesar de haberlo dicho y haber reconocido lo que había dicho, seguía aferrándome a mi antigua y conocida carátula mental de identidad religiosa. Después de todo, no había dicho que era musulmán. Simplemente era un cristiano, aunque un cristiano atípico que estaba dispuesto a decir que existe un solo Dios, y no una trinidad, y que estaba dispuesto a decir que Mujámmad (Paz y Bendiciones de Dios sean con él) fue uno de los profetas inspirados por ese Dios. Si un musulmán quisiera aceptarme como musulmán, eso era problema suyo, no mío. Yo creía que había encontrado mi propia salida a la crisis de identidad religiosa. Era un cristiano que explicaba minuciosamente que estaba de acuerdo, y tenía la voluntad de atestiguar el testimonio islámico de fe. Luego de dar mi torturada explicación y haber hecho sufrir al idioma hasta el límite de su vida, los demás podían ponerme la etiqueta que quisieran. Era su etiqueta, no la mía. (Tomado de http://www.islamreligion.com/es/articles/102/, el original en inglés se encuentra en http://www.welcome-back.org/profile/dirks1.shtml).



Esto significa, por un lado, que puede haber un buen número de musulmanes que están haciendo sus cinco oraciones, leyendo el Corán y poniendo en práctica las enseñanzas del profeta Mujámmad (PyB), pero por una u otra razón aún no se consideran a sí mismos musulmanes, no van a las mezquitas ni están en ningún registro de las comunidades musulmanas. Por otro lado, significa también que se dan casos en los que la persona, aun habiendo aceptado el Islam, no logra decidirse del todo y considera que puede mantener “lo mejor de ambos mundos”, como afirman muchos sincretistas que, en realidad, prefieren tomar lo que más les conviene de diferentes religiones y/o filosofías, antes que asumir un compromiso serio con una mentalidad y una forma de vida específicas. Esto es particularmente comprensible en el caso de personas con una profunda convicción y tradición cristianas, que al abrazar el Islam, consideran que pueden mantenerse como cristianos y musulmanes a la vez. Por supuesto, a medida que la persona conoce y comprende más y mejor el Islam y lo lleva cada vez más a la práctica en su cotidianidad, empieza a ver que aceptar a Jesús y a María Virgen (la Paz de Dios sea con ambos) y al origen divino de los textos originales de la Torá (Pentateuco), los Salmos, los Proverbios y el Evangelio, no significa permanecer en el cristianismo, sino que es parte fundamental de la fe islámica. En cambio, colgarse un crucifijo al cuello, creer en santos, tener imágenes, y creer en la Trinidad y en la infalibilidad de la Biblia como la conocemos hoy, es parte del cristianismo pero es rechazado en el Islam. Igualmente, mientras para los musulmanes no hay problema en reconocer la misión profética y mesiánica de Jesús (P) y la inspiración divina de gran parte de la Biblia, para los cristianos es inconcebible aceptar la misión profética de Mujámmad (PyB) y la inspiración divina del Corán, así como para los musulmanes es inconcebible creer que Dios se encarnó o que ha engendrado un hijo.


Por ello, ha causado tanto revuelo el caso de la Dra. Ann Holmes Redding, quien fuera ministro de la Iglesia Episcopal de Rhode Island, Estados Unidos, por casi 30 años. Redding se graduó de la Brown University, donde obtuvo grados de Master en dos seminarios. También recibió doctorado en Nuevo Testamento en el Seminario de Unión Teológica en la ciudad de Nueva York. Ordenada sacerdotisa en 1984, la Reverendo Redding sorprendió a sus feligreses en junio de 2007 cuando desde el púlpito de la Catedral Episcopal de San Marcos, en Seattle (donde servía como Directora de Formación en la Fe), confesó haber abrazado el Islam 15 meses antes, durante una conferencia interreligiosa. La Iglesia Episcopal es la representación de la Comunión Anglicana en los Estados Unidos y en varios países de América Central, del Sur y el Caribe. Con unos 77 millones de fieles, la Comunión Anglicana (asociación de iglesias cuyo centro religioso es la Iglesia de Inglaterra y el Arzobispo de Canterbury) es la tercera mayor denominación cristiana existente, después de la Iglesia Católica Apostólica y Romana, y de las Iglesias Ortodoxas de Oriente. Estas 3 Iglesias son las únicas de filiación católica, es decir, aunque el anglicanismo se considera a sí mismo “de la Reforma aunque no evangélico”, se considera también “católico aunque no romano”. En la práctica, esto significa que las Iglesias Romana, Ortodoxa y Anglicana tienen en común el sacerdocio y el sacrificio de la Eucaristía, así como la arquitectura de sus templos y varias semejanzas doctrinales, entre ellas la de la Trinidad. Pero la Anglicana es la única iglesia cristiana que ordena a mujeres sacerdotisas, como la Rev. Redding, quien tiene el record de ser la única mujer que ha oficiado una Misa con la participación de un invitado que hizo recitaciones coránicas en lugar de los tradicionales cánticos cristianos (véase el video en http://www.youtube.com/watch?v=83c535Rpdhk).

En julio de 2007, el Rev. Geralyn Wolf, Obispo de la Diócesis Episcopal de Rhode Island, suspendió a la Rev. Redding, impidiéndole no sólo oficiar Misa sino enseñar o predicar en cualquier seminario, iglesia o institución anglicanas. A pesar de ello, la Dra. Redding estuvo dictando la materia Estudios del Nuevo Testamento en la Universidad de Seattle, institución católica romana de filiación Jesuita (más información en http://geoconger.wordpress.com/2007/07/14/muslim-anglican-priest-is-banned-in-seattle-cen-71307/). Redding se mantuvo en su afirmación de que Jesús (P) la llevó al Islam, y que el Islam la hacía mejor Cristiana.


Aunque en algunos lugares de Internet aparecieron comentarios amenazantes contra la Dra. Redding, desde quienes afirmaron sentir deseos de vomitar al conocer su historia, hasta los que aseguraron que ella debía ser quemada al estilo cristiano medieval, muchos anglicanos (incluyendo algunos obispos) y algunos cristianos de otras filiaciones le mostraron su apoyo. Aún así, en abril de 2009, tras pronunciar un emotivo sermón desde el púlpito de la Iglesia Riverside en la ciudad de Nueva York (una de las más grandes e internacionalmente reconocidas congregaciones de los Estados Unidos), fue expulsada de la Iglesia Episcopal (la noticia puede leerse en http://www.ajc.com/news/content/news/stories/2009/04/01/muslim_priest_defrocked.html).


Respecto a por qué mantiene su posición de ser Musulmana y Cristiana a la vez, Redding afirmó que tanto en el cristianismo como en el Islam hay todos los elementos suficientes para llenar espiritualmente a una persona, y que por tanto, ella no pretende enseñar que sea necesario pertenecer a ambas religiones. “Todo está allí. No estoy diciendo que Usted deba ir a otro lugar para estar completo. Algunas personas no necesitan gafas, algunas personas requieren lentes sencillos. Yo necesito bifocales”, aseguró (tomado de http://www.cnn.com/2009/US/04/02/muslim.minister.defrocked/index.html). Sin embargo, Redding está ávida de dar a conocer su experiencia y sus creencias. En 2009, publicó su libro "De la Oscuridad a la Luz: Guía Espiritual en el Corán con Reflexiones desde Fuentes Cristianas y Judías", coescrito con Jamal Rahman y Katheen Schmitt Elias, y aseguró que prepara sus memorias.

En 2007, el blog Planet Grenada, tras la revelación de la doble filiación de Redding, publicó:


Una historia reciente en el Seattle Times trata de la Rev. Ann Holmes Redding, que ha sido sacerdotisa episcopal por más de 20 años y musulmana por los últimos 15 meses… simultáneamente. El artículo “Soy Musulmana y Cristiana a la vez”, me recuerda al pastor de la Iglesia Presbiteriana cercana a mi casa quien, en una conversación que tuvimos hace unos años, no sólo cuestionó la divinidad de Cristo, sino que culpó al dogma de la divinidad de Cristo de distraer a los Cristianos de la lucha por la justicia social aquí en la Tierra. Durante dicha conversación, él también explicó cómo no creía en la infalibilidad de la Biblia y expresó un duelo profundo por un activista Musulmán local que fue deportado a raíz del 9/11. (Tomado de http://planetgrenada.blogspot.com/2007/06/i-am-both-muslim-and-christian.html).



En lo personal, por una parte no veo contradicción en que una persona sea Musulmana y crea en Jesús (P), lea la Biblia (a la luz del Corán) y practique las enseñanzas de Jesús (P), pues pronto descubrirá por su propia cuenta que son las mismas enseñanzas de Mujámmad (PyB) y que el Corán recupera el sentido original de la Biblia haciéndola innecesaria excepto para estudios interreligiosos (véase Más Allá de un Mero Cristianismo). Lo que no entiendo es cómo una persona siendo Musulmana pueda ejercer el sacerdocio, cuando el Islam enseña que no existe clero pues no hay intermediario alguno entre Dios y los seres humanos (véase Lo que no es el Islam). Tampoco entiendo cómo una Musulmana podría colgarse una cruz al cuello, cuando eso es considerado idolatría en el Islam. Sin embargo, eso tiene su explicación en el testimonio del Dr. Jerald F. Dirks que he mencionado más arriba y en su análisis psicológico sobre la adicción y la identidad. Para el occidental, vivir como Musulmán significa romper todos sus esquemas y comenzar a pensar, sentir, vivir y ver el mundo desde una perspectiva completamente diferente, y eso es un proceso personal y complejo. Sólo en la absoluta determinación a cambiar de vida y a someterse de forma pacífica y absoluta a la voluntad de Dios, se puede encontrar el camino correcto para completar ese proceso, y sólo con la ayuda de Dios, éste puede culminarse de forma satisfactoria, inchAl-Lah (si Dios quiere).

Pero hay también un elemento clave para entender todo esto, en el testimonio de Redding. Ella afirma:


Las personas dentro de una religión no pueden siquiera ponerse de acuerdo en todos los detalles. Así que ¿por qué debería pasar el tiempo tratando de reconciliar todos los del Cristianismo con todos los del Islam? En el nivel más básico, entiendo que las dos religiones son compatibles. Eso es todo lo que necesito. Esto no se trató del intelecto. Todo lo que sé es que el llamado de mi corazón al Islam fue mucho más acerca de mi identidad y de lo que se supone que debo ser. No podría no ser Musulmana. (Tomado de http://seattletimes.nwsource.com/html/localnews/2003751274_redding17m.html).


Semejante afirmación es perfectamente compatible con la fe ciega que promulga el cristianismo, ese “escuchar el llamado” totalmente irracional, que resulta más que suficiente para quien cree que la fe es asunto del corazón o la intuición. Esto es incompatible con el Islam, donde se afirma que “la fe surge del conocimiento”. Todo Musulmán y toda Musulmana estamos obligados a buscar el conocimiento, y eso implica no sólo estudiar una profesión u oficio y aprender sobre ciencias y artes, sino estudiar en profundidad la religión, conocer lo más posible de acuerdo a las capacidades de cada quien sobre los rituales, las doctrinas, la legislación y jurisprudencia, la economía y la política, y todos los aspectos de la vida regidos por la ley coránica, incluidos por supuesto, la ética, la moral y la etiqueta islámicas. A diferencia de muchos Cristianos que interpretan la Biblia a su manera, o que incluso la desconocen y simplemente van a la iglesia los domingos a congregarse y con ello cumplen con su religión, los Musulmanes debemos leer permanentemente el Corán y estudiar cómo fue interpretado por los compañeros del Profeta (PyB) y por él mismo, para así conocer muy bien nuestra religión y ponerla en práctica en cada aspecto de nuestras vidas, en cada acto de nuestras cotidianidades, pues es de esta forma que alabamos a Dios todo el tiempo, en jornada continua 7/24. Para ser Musulmán no es suficiente con “escuchar el llamado”, hay que comprender con claridad, tanto en el intelecto como en el corazón, qué es el Islam y cómo debe vivir un Musulmán.


Como sacerdotisa, la Dra. Redding debe conocer mucho del Cristianismo, en particular de la historia, teología y doctrinas del anglicanismo. Quizá el haber sido expulsada de su Iglesia le permita ahora asumir el reto de ser Musulmana, de conocer a profundidad la historia, teología y doctrinas del Islam, y llevar una vida completamente diferente a la que ha tenido hasta ahora. Una empresa nada fácil, pero que siempre da maravillosos frutos. Que Dios la guíe por el camino recto y le dé fortaleza y sabiduría para completar su proceso, inchAl-Lah.

Cómo puedo ayudar a alguien que se hizo adicto al facebook y ha descuidado su trabajo y necesidades básicas?

Photobucket

Por Néstor Pedraza

Todas las adicciones, en su base, son iguales, cambia sólo el objeto de la adicción. Tabaco, sexo ilícito, alcohol, drogas, chat, facebook, pornografía, teléfono celular, videojuegos, incluso la adicción al trabajo. Todo adicto te dirá lo mismo: Yo lo controlo, estás exagerando, déjame hacer mi vida, no te metas, déjame en paz, así soy yo, es mi vida y hago con ella lo que quiero, estás envidiosa, es mi forma de socializar y quieres aislarme del mundo, me gusta y ya, uno tiene derecho a disfrutar lo que le gusta, no le hago mal a nadie, yo veré lo que hago, es parte de mi personalidad...

Son palabras totalmente opuestas a las de un creyente. Veamos:

"Yo lo controlo" -> No existe fuerza ni poder salvo en Dios.

"Estás exagerando, no te metas, déjame en paz, etc." -> El creyente agradece que otros se preocupen por su estado y escucha a quien le amonesta por una falla que debilita su religión o peor aún, lo lleva fuera de ella.

"Es mi vida." -> La vida le pertenece a Dios. A él responderemos por lo que hagamos con ella.

"Me gusta, hago lo que quiero, déjame disfrutar, etc." -> No vinimos al mundo a hacer lo que queremos sino lo que Dios quiere que hagamos. Podemos disfrutar de las cosas que Dios nos brinda, pero no es esa nuestra razón de ser en el mundo. Podemos disfrutar de la felicidad, pero no vinimos a dedicarnos a buscar la felicidad. Vinimos a adorar a Dios, y la forma de adorarlo es cumplir Su ley en cada cosa que hacemos. Y sólo en Él encontramos la tranquilidad y el verdadero disfrute de las cosas.

"No le hago mal a nadie" -> Se hace daño a sí mismo, y como no somos seres aislados en el mundo, al hacernos daño a nosotros mismos, lastimamos a quienes tenemos cerca, a quienes se preocupan por nosotros. Y Dios ha ordenado que no nos dañemos ni dañemos a otros. Además, no sólo debemos no hacer el mal, debemos hacer el bien y prohibir el mal.

"Así soy yo, es parte de mi personalidad" -> Este es el centro del asunto. El adicto se relaciona y se identifica con su adicción. La persona cree que su vicio es parte de su ser, que está en su mente, en sus genes, que eso lo identifica como persona. Ya todos lo conocen como el tomatrago, o como el fumador, o como el que siempre está conectado en Facebook. Es algo que lo distingue, como el color de sus ojos o su acento, y si lo deja, va a dejar de ser él, va a perder una parte de sí, la gente dirá "a este lo perdimos, ahora es otro, ya no es como antes", va a perder sus amistades, va a quedar solo y aislado. Romper esa creencia retorcida es lo más difícil, es romper un esquema muy íntimo y profundo, y eso sólo se logra con la ayuda de Dios, pero también con esfuerzo y determinación. A este respecto, la lectura "Romper Esquemas" (http://www.facebook.com/note.php?note_id=133602354820) puede serte útil, allí hay el testimonio de un psicólogo que habla sobre la identificación del adicto con su adicción.

Por otra parte, las adicciones siempre son una manifestación de una carencia interior. La persona está llamando la atención, aunque sea algo inconsciente. Su actitud autodestructiva es la respuesta a un mal del corazón, y sólo podemos curar y purificar nuestro corazón en el constante ejercicio de buscar a Dios y vivir como Él manda.

Carencias afectivas, vacíos emocionales, sentimientos de culpa, falta de autoestima, etc. Vivimos en un mundo que se alimenta de la escasez: si hay escasez de alimentos, estos son más costosos y el negocio es rentable, si tienes todo en tu casa pero te convencen de que debes cambiar de teléfono celular cada año, de computador cada 6 meses, de muebles de sala cada dos años, de ropero cada 3 meses, pues siempre te sentirás incompleta, siempre necesitarás algo, siempre estarás comprando. Igualmente, si tu familia ha sido destruida, tu educación es una mera preparación laboral, tu espíritu y tu intelecto no han sido debidamente alimentados, siempre vas a estar buscando la forma de llenar esos vacíos. Y la publicidad y los centros comerciales se la pasan todos los días diciéndote "nosotros te llenaremos, compra". ¿Consumimos alcohol, droga, tabaco, Facebook, música? En realidad, no. Facebook nos consume, al igual que la droga, el alcohol, el tabaco, la pronografía, el sexo ilícito... Pero como esta sociedad se alimenta de la escasez, es apenas comprensible por qué todos los "esfuerzos" para acabar con la pobreza, el hambre, la ignorancia y la ausencia de valores, son inútiles: porque son una falacia, un montaje. Aunque haya personas que luchan sinceramente (e ingenuamente) por ello, nunca tienen el presupuesto, la autoridad y el alcance para alcanzar logros medianamente significativos, sólo sirven para aparecer en las noticias junto al político de turno, especialmente justo antes del circo electoral.

Mientras busquemos llenarnos con las cosas mundanas, incluso con las que resultan positivas (el amor del esposo o esposa, de los padres, de los hijos), siempre nos sentiremos vacíos, pues nada ni nadie puede llenarnos más que Dios. Muchas mujeres de hoy día, abandonadas por el padre de sus hijos, se aferran a éstos y les chupan la vida, tratando de llenarse ellas de su amor y así solventar sus vacíos. Pero pareciera lo contrario, pareciera que se entregan por completo, y lo hacen, pero de una forma que es enfermiza, aunque en el actual estado de cosas, se ha hecho común, normal, prácticamente única y sin opción. Entonces tenemos seres sobreprotegidos, malcriados, y aún más vacíos que sus padres, que serán los que construirán el mundo del mañana. Esto no pinta nada bien, está claro.

Entonces, estimada hermana, tu pregunta tiene una respuesta simplísima, pero a la vez, un curso de acción que yo no podría siquiera sugerir. La respuesta es Dios, sólo cuando esa persona vuelva al hogar, a su naturaleza primigenia, es decir a la sumisión total a Dios, sólo entonces estará libre de todo vicio, su vida será plena, y podrá aspirar a ser de los exitosos en esta vida y en la última. Pero sólo Dios decide a quién da Su guía y a quien no.

De modo que lo que se debe hacer con esa persona, depende de la persona, de su entorno y de tu relación con ella. Hay que manejar el asunto con inteligencia, buscar la forma de llegarle a la persona sin que se ponga a la defensiva. Quizá buscar que otras personas hablen con él, un profesional podría ser algo muy positivo.

Pero hay una gran ventaja: eres musulmana. Lo mejor que puedes hacer por esa persona es, precisamente, ser musulmana. ¿Por qu ... Ver másé? Porque como musulmana, llevas una vida recta, entonces te constituyes en un ejemplo para esa persona. Porque como musulmana, permanentemente nombras a Dios y hablas de Él y de Su misericordia, e inevitablemente esa persona escuchará. Porque como musulmana, haces tus cinco oraciones obligatorias diarias y puedes hacer varias voluntarias, y esa persona te verá o sabrá que todos los días adoras a Dios, y tu podrás pedirle a Dios en tus oraciones que guíe a esa persona. Porque como musulmana, eres autocrítica, siempre estás buscando mejorar para agradar a Dios, y esa persona seguramente ha de notar tu fuerza, tu ímpetu, emanados de Dios y dirigidos hacia Él. Y porque como musulmana eres responsable y te exiges siempre, para cumplir con todos tus deberes, para defender tu Din y tu familia, y para mantenerte en la vía recta.

Fortalece tu religión y tu creencia, esfuérzate en el camino de Dios, y ofrécele a esa persona tu ayuda, tu afecto, tu fortaleza y tu conocimiento, al tiempo que ruegas a Dios por esa persona. Si Dios quiere, Él te hará Su instrumento para llevar a esa persona hacia la Verdad. Si no, acepta Su voluntad con paciencia. Recuerda que no se puede ayudar a quien no quiere aceptar la ayuda, y que nadie puede brindarnos ayuda real y efectiva más que Dios.

Que Dios te guíe y te de sabiduría.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Abrazo.

Photobucket
Imagen: Sandra Cartasso

Por Sandra Russo

Un abrazo es un acto que ya tiene varias dimensiones. Implica al menos a dos, porque un abrazo a sí mismo a cualquiera le suena a simio, a desfasado, a narcisista. El abrazo consiste de al menos dos: uno que abraza y otro que es abrazado. Son los brazos los que abrazan y entre ellos hay alguien más que uno. El abrazo es un acto de comunicación.

Un abrazo nos pone en la situación peculiar y única de estar con otro. Nunca estamos con alguien como con cualquiera. Nunca tenemos tiempo de ponernos a pensar estas cosas, pero siempre que estamos con alguien somos otros. La vecina que nos tira mala onda nos hace ser antipáticos. El portero que nos hace chistes tan temprano nos hace simpáticos. El taxista que pone el seguro de la puerta trasera cuando se acerca un pobre nos hace impotentes o gritones o pasajeros ya tensos por la radio sintonizada en la 10.

Los demás van sacándonos de a una las cartas apiladas que somos. Sartre dijo que el infierno son los otros. También son el cielo, la nube y el rayo. Los otros son los que nos sacan de nuestra introspección, de esa mitad que somos reconcentrados en nosotros, de nuestros pensamientos recurrentes, de nuestros soliloquios. Los otros nos determinan. Ellos completan todas las circunstancias que vivimos.

El abrazo, así, puede ser íntimo y privado, pero nunca individual. Siempre hay alguien que abraza y alguien que es abrazado.

El abrazo también puede ser colectivo. Los abrazos como forma de manifestación implican respaldo y protección. Cuando se abraza a un hospital, es porque algo en él corre peligro, porque se valora a su personal o porque hay una amenaza. El abrazo a un tribunal puede querer decir que se respalda y se quiere proteger algo que allí corre peligro. Una causa, por ejemplo. Una causa que no avanza o que será condenada extrajudicialmente por la Justicia. Lo ideológico también es extrajudicial. Los grandes avances del derecho se han dado cuando la interpretación de las leyes ha podido saltear lo ideológico. Tiene que ver con esto la venda de la Justicia. Con no elegir a uno y perjudicar a otro por motivos de raza, religión o ideología.

“Madres de la Plaza, el pueblo las abraza” un canto que nos acompaña desde hace más de treinta años como pueblo, implica el sostén y la solidaridad de muchos con ellas, que fueron puestas a sufrir el duelo sin fin de las desapariciones. Nos faltan 30.000 dirigentes políticos, sindicales y barriales de 50 años. Nos las hemos tenido que arreglar sin ellos, que seguramente habrían arrojado referentes políticos que hoy no tenemos. Tenemos ese Congreso con esos personajes inenarrables, que reciben y dan continuamente transfusiones de los grandes medios. Intercambian objetivos, deseos, anunciantes, estrategias, material judiciable. La evidente reivindicación del terrorismo de Estado que se puso en marcha discursivamente hace ya meses se corona esta semana con la actuación de la Cámara de Casación en la causa Noble y con el tratamiento vergonzoso que recibió la causa Sarmiento.

Para colmo, la muerte de dos adolescentes de Baradero en un hecho en el que un móvil de la Dirección de Tránsito es sospechado de haberlos perseguido y atropellado es leída para los espectadores de los dos canales de noticias por César Scollo, a quien presentaron como “periodista” pero está imputado en delitos de lesa humanidad, entre ellos uno que le adjudica la desaparición del hijo de Sara Cobacho, la titular de la Secretaría de Derechos Humanos provincial que en diciembre fue atacada.

Este 24 nos encuentra recordando más que nunca, conectados como hace mucho tiempo que no estábamos con la memoria. En los años que han pasado, hasta Chiche Gelblung tuvo un programa que se llamó Memoria. La palabra fue expropiada por los que no entran nunca en el sentimiento popular y ético de lo que significa la memoria en la Argentina. No solamente a un vip uno tiene o no acceso. A los sentimientos populares también. Hay gente que no tiene la predisposición moral necesaria para entrar en una dimensión colectiva del amor. O de la pulsión de vida, que es lo mismo.

Este 24 el abrazo a las Madres y las Abuelas es más fuerte, más hondo y más intenso. Porque cuando abrazamos no estamos nunca solos y porque recordamos. Ni olvido ni perdón fue la consigna de estos treinta años. Y el pedido, siempre el mismo, aunque todavía haya que gritarlo: justicia.

http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-142550-2010-03-24.html

Qué es noticia y qué no lo es.

Photobucket

Cronopiando


Koldo Campos Sagaseta
Rebelión



Si Al Qaeda, por ejemplo, hiciera estallar hoy en el mundo cien camiones cargados de toneladas de explosivos matando a 17.000 personas ¿alguien duda de que esa sería la noticia que recogieran mañana en sus titulares todos los periódicos? ¿Es posible concebir que un informativo por radio o por televisión no hiciera de semejante masacre la noticia del día?

Me consta que no habría espacio en los medios para nada que no fuera la muerte de esas 17.000 personas. Entrevistas, reportajes, valoraciones, condenas, represalias… A través de los medios asistiríamos una y otra vez a las imágenes del horror, nos aprenderíamos de memoria los nombres de las víctimas, guardaríamos todos los minutos de silencio, mostraríamos toda nuestra enérgica repulsa clamando al cielo porque nunca volviera a repetirse tan terrible atentado. Seis torres gemelas destruidas.

Pues bien, cuando termine el día de hoy habrán muerto 17.000 personas en el mundo, sólo que no a manos de una perversa organización terrorista sino a causa del hambre que impone el bendito mercado, auxiliado de algunos estados, fondos monetarios y bancos mundiales, como pretexto que garantice nuestro modo de vida.

Obviamente, esos miles de muertos no serán noticia, no tendrán cabida en ninguna primera página, no aparecerán en los informativos, no sabremos que han muerto.

Y el problema es que mañana también morirán otros 17.000 seres humanos por la misma causa, con la misma impunidad y en el mismo silencio. El capitalismo, la más repulsiva lacra humana que se haya podido crear, el más nauseabundo de todos los terrores, los mata todos los días.

Un medio de comunicación que por tal se tenga, que se diga apegado a la verdad e independiente, que asuma con rigor su responsabilidad de informarnos de lo que pasa en el mundo, ya debería tener preparados sus titulares de mañana denunciando la muerte de esas 17.000 personas por hambre, a las que habría que sumar el millón y medio de niños muertos al año, un niño cada 15 segundos, según reportaba en estos días Naciones Unidas, por carecer de agua o beber agua contaminada por los vertidos de un mercado que no parece dispuesto a reducir el frenesí del negocio ante semejantes menudencias. El supuesto progreso, en cuyo nombre se perpetra el crimen, no sólo nos mata sino que, además, nos niega.

Y la excusa, la más socorrida coartada para que los medios de comunicación nos escondan la diaria matanza es que, precisamente, por ocurrir todos los días, nunca son noticia esos 17 mil cadáveres.

Por la misma razón tampoco ha tenido mayor despliegue en los medios de comunicación el descubrimiento de una fosa común en la democrática Colombia, esa que dice Miguel Bosé tiene “dos cojones”, con dos mil cadáveres de campesinos asesinados por paramilitares y el Ejército de ese país. Cierto que era la mayor fosa descubierta pero son decenas las que ya se han hallado y las que aún faltan por descubrirse.

Por ello tampoco es noticia el asesinato de miles de sindicalistas en ese mismo país, o el diario asesinato de opositores en Honduras, o la guerra pública que el narcotráfico arraigado en estados que le sirven de amparo, han convertido a México en una maldición.

Como no es noticia que democracias europeas que se tienen por paradigma de todas las virtudes apelen a la tortura con generosa insistencia e impunidad; que se les pierdan los disidentes por las morgues o que pongan en la calle a los escasos criminales y delincuentes a los que se tuvo la desfachatez de someter a la justicia.

Tal vez por ello, porque nunca había ocurrido antes en Cuba, dado que los cinco presos que hasta la fecha se han suicidado en Guantánamo no parece puedan cargarse en la cuenta de La habana, el que un preso haya llevado una huelga de hambre hasta sus últimas consecuencias si justifica el derroche de titulares, adjetivos y días que los medios de comunicación todavía le dedican.

Parafraseando a Santiago Alba cuando al respecto de la mentada crisis escribía que la crisis no consiste en que millones de personas mueran de hambre en el mundo sino que un grupito de millonarios no alcancen a ganar lo suficiente, la noticia tampoco es que mueran sólo de hambre 17 mil personas todos los días sino que un preso cubano muera en huelga de hambre.

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=102817&titular=qu%E9-es-noticia-y-qu%E9-no-lo-es-